Faltaban tan sólo unos minutos para las nueve de la noche. El Salón de Actos de la UNED de Tudela se encontraba completamente abarrotado de estudiantes de la UNED, de familiares y amigos.
En un intenso silencio y antes de finalizar la celebración del Día de la UNED, el Subdirector del Centro Asociado procede a leer el acta del jurado del IV Premio Marqués de San Adrián al Mejor Expediente Académico.
"Por su excelente expediente académico, por el número de años invertidos en su consecución, por ser unos estudios especialmente relacionados con el mundo de la empresa y por haber compaginado la realización de los mismos con el desempeño de un puesto de trabajo a jornada completa, el jurado ha decidido otorgar el IV Premio Marqués de San Adrián al Mejor Expediente Académico a Iñaki Alzórriz Armendáriz", anuncia José Miguel Laco Irigoyen.
La alegría inunda el rostro del galardonado.
"La verdad es que me ha hecho mucha ilusión recibir este premio. Ha sido, además, una gran sorpresa", apunta Iñaki Alzórriz Armendáriz.
A pesar de llevar tiempo dedicándose a la Informática, fue hace seis años cuando Iñaki decidió estudiar la carrera de Ingeniería Técnica Informática. Su única opción, la Universidad Nacional de Educación a Distancia.
“Yo trabajaba a jornada completa, por lo que para mí era imposible estudiar en una universidad presencial. La verdad es que empecé con un poco de incertidumbre en la UNED. Hacía años que no estudiaba y, además, en el primer curso había una serie de asignaturas de matemáticas que no sabía cómo se me iban a dar. Pero con esfuerzo y con la ayuda de José Maria Mateo, tutor de matemáticas que me ayudó a perderles el miedo y a demostrarme que podía con ellas, ese primer año me fue muy bien”, asegura Iñaki Alzórriz.
En cuatro años Iñaki consiguió acabar la carrera; cuatro años en los que tuvo que compaginar sus estudios con su vida familiar y laboral.
"Estudiar, trabajar y tener una vida familiar es duro. Sin embargo, con organización se puede hacer. Al final, lo que más sacrificas son tus horas de ocio; renuncias a ellas para poder sacar tiempo para estudiar. Para mí la clave ha sido el ser muy metódico. Intentaba estudiar todos los días un par de horas y los fines de semana le dedicaba todas las que podía. De todas formas, sin el apoyo familiar esto no hubiera sido posible. Si no hubiese sido porque mi mujer me ha apoyado en todo momento, no habría podido seguir adelante con la carrera. A fin de cuentas hemos renunciado a muchas de nuestras horas juntos, a salidas los fines de semana etc".
Diplomado, también, en Empresariales, Iñaki continúa apostando por su formación. Actualmente, cursa un Máster Universitario en la UNED.
"La verdad es que la experiencia en la UNED ha sido muy buena. Al principio, pensaba que el estudiante de la UNED estaba solo, pero esa idea cambió rápidamente. Por un lado, está el Centro Asociado, en el que tanto el personal de administración como los tutores siempre te ayudan en todo lo que pueden. Para mí ha sido un sitio en el que siempre me he encontrado apoyado. Siempre que el trabajo me lo ha permitido he acudido a las tutorías. Por otro lado, está toda la infraestructura virtual que tiene la UNED, con sus cursos virtuales, foros, etc. Gracias a estos medios he podido mantener el contacto con otros compañeros, cambiar impresiones, apuntes... He tenido acceso a más materiales en mi experiencia en la UNED que a los que tuve acceso en su día en la universidad presencial".
El IV Premio Marqués de San Adrián al Mejor Expediente Académico lanza un mensaje a los actuales estudiantes:"Me gustaría enviarles un mensaje de ánimo. Esto es duro y, a veces, se hace cuesta arriba; pero la recompensa supera con creces el esfuerzo invertido".