El artista Bóregan cede a la UNED de Tudela su obra “Esfuerzo y progreso compartido” 

Con la cesión de esta obra, la previa creación del canecillo del alero (1993) y de la basa de la columna izquierda en el arranque de la escalera, realizado con piedra caliza, son tres las obras e intervenciones del artista navarro que forman parte del pasado y del presente de la UNED de Tudela.

En el año 1993, Bóregan realizó la talla del canecillo del alero del Palacio, el único que se cambió durante la restauración del Palacio del Marqués de San Adrián, manteniendo la mano original del angelote, tal y como puede apreciarse en la segunda fotografía de la derecha.

Este encargo supuso una sorpresa y un reto para Bóregan: “normalmente no me ciño a un tipo de encargo o trabajo y éste supuso una apuesta muy bonita, resulta muy agradable intervenir en un palacio del siglo XVI con una historia tan relevante. En definitiva, puedo afirmar que el hecho de participar en este proyecto y contemplar tantos siglos de historia fue emocionante”. 

Bóregan confiesa, además, que siente un cariño muy especial por Palacio del Marqués de San Adrián: "siento que tengo algo mío en este edificio histórico. Además, el Renacimiento y el Barroco siempre han supuesto una fuente inagotable en mi creación”.

En noviembre de 1992, la empresa que llevaba a cabo la restauración del Palacio de San Adrián, realizó el encargo de este trabajo a Bóregan. El primer paso que siguieron fue subir al tejado para analizar el estado del mismo y de sus piezas y vieron que era necesario sustituir algunas por otras nuevas. Tras esta valoración, llevaron al taller del artista todos los elementos que requerían de un proceso de restauración. "En ese momento también nos encontramos con el hecho de que muchas piezas se habían desprendido y otras habían sido dañadas por la carcoma”.

En el proceso de creación de piezas, se utilizó la misma madera que en siglo XVI, es decir, madera de pino sin sangrar. "Incluso para hacer uno de los nuevos canes se utilizaron dos vigas de madera de esa época, provenientes de un derribo de aquel entonces". 

También se transportaron al taller de Bóregan los rombos hexagonales, en cuyas piezas formadas por relieves en redondo, se representan cabezas de angelotes y ornamentación vegetal y floral, entre otros. “Los hice pegando las piezas con trocitos de madera y tallándolas. Para  llevar a cabo esta parte del trabajo, hubo que buscar la madera adecuada, tornearla y tallarla, imitando las piezas que estaban sanas. También realicé dos tallas de varias cenefas en las que aparecen representadas cabezas de angelotes y de diablos, incluso 

en una de las dos tallas aparecen una pierna, una mano, un ramo de frutos de vegetales y cabezas grotescas".

Por último, "una vez finalizadas las tallas, el trabajo fue trasladado al tejado y se aplicaron tratamientos anti xilófagos y anti moho, para después endurecer la madera con resina sintética, formada por escamas disueltas en disolvente Tolueno. El último paso el cerramiento de la madera y la imprimación, de tal manera que tanto la madera nueva como la antigua se homogeneizaron.     

“Esfuerzo y progreso compartido” (2011)

Esta escultura que ha cedido Bóregan a la UNED de Tudela representa, tal y como él mismo explica, varios conceptos: "el bastión, el torreón, la fábrica, la empresa y los pilares. Podemos observar a dos personas, concretamente a un estudiante portando un libro y el otro una carpeta, que se  miran mutuamente. Ambos están unidos por la globalidad, representada en medias esferas. Una vez que estas personas concluyen el camino de la formación -explica el artista- podría representar a cualquier persona hecha para el mundo y que trabajan unidas. De ahí, las miradas y el diálogo entre las dos figuras. El inicio del progreso está en ellos, es decir, en todas las personas que van a la universidad”. 

Asimismo, en esta obra de arte, se puede observar un vacío en el tórax de cada una de las figuras: “es muy significativo, refleja el vacío de todo ser humano. Las cosas buenas las ofrecemos y las malas las expulsamos. Al final, lo más importante es la base por la que tienen que caminar juntos (la universidad, la empresa, etc) cercado por un baluarte, en el que si no das bien los pasos, te puedes caer”, concluye Bóregan. 

Sobre el artista 

Bóregan (1951, Cintruénigo, Navarra) estudió Bachillerato en Puente la Reina y Alba de Tormes. A los 17 años comienza como aprendiz y trabaja como tallista en varios talleres artístico-artesanales de alabastro y madera en Cintruénigo. Acude a cursos de dibujo, pintura y modelado en la Escuela de Arte de la misma localidad.

En 1979 crea su propio taller y exposición permanente abierta al público, en Cintruénigo. Al mismo tiempo, realiza cursos de modelado, moldes, dorado, policromado, hierro y forja en la Escuela de Artes y Oficios Artísticos en Corella.

En 1997 construye y abre al público el centro de arte “TUDEJEN”, su nuevo taller-estudio y galería de arte con su obra completa expuesta. 

En el año 2003, se instala de nuevo en Cintruénigo, en un entorno natural, al lado de la vega del río Alhama, aprovechando y rehabilitando una antigua edificación situada a escasos 500 metros del casco urbano. Es ahí donde crea su nuevo taller y donde expone, actualmente, parte de su obra escultórica.

A lo largo de su trayectoria artística, Bóregan ha ido repartiendo su obra, ya sean monumentos públicos o encargos privados, por toda la geografía española y, también, en países como Francia, Alemania, EE.UU, México, Emiratos Árabes, Japón e Italia.

Ha realizado unas 70 exposiciones en ciudades como Pamplona; Tarragona; Benidorm; San Sebastián; Soria; Zaragoza; Logroño; Bilbao; Madrid; Valencia “Interart 98-99”; Ibiza “ArtIbiza 99”; Sevilla”Arte Sevilla 2000-2001”, Barcelona “Artexpo 98-99”; Londres “AAF 2000”; New York “Artexpo 2000”, “Arte Santander 2000”; Estrasburgo”Festival Mediterráneo 1999; Orlando (Florida); Paderborn (Alemania) Castillo de Aauenpark; Olite (Navarra) Castillo Real, Tudela Palacio Marqués de San Adrián; Mugrón (Francia) Ayuntamiento; San Jean de Pie de Port (Francia) Ayuntamiento y Estrasburgo 2002, Consejo General del Bajo Rhin. 

Del 2 al 20 de junio de 2001 expuso en esta institución “Retrospectiva 1981-2001. Veinte años de escultura, cuatro caminos de expresión”, compuesta por cerca de 100 obras que se ubicaron en varios espacios del Centro: Sala Roja, Sala Azul, Sala Verde, Sala Amarilla, Patio y Atrio. (Fotografías de la derecha).