Un año más la UNED de Tudela y la Fundación Atapuerca convocan una beca para participar este verano en las excavaciones del Yacimiento de la Sierra de Atapuerca ¿A quien se dirige esta convocatoria?
"A estudiantes del Grado de Geografía e Historia de la UNED de Tudela, que sientan la vocación por la investigación arqueológica y que quieran aprender o perfeccionar sus conocimientos en el marco del que, creo, es el proyecto líder en España en investigación en prehistoria".
¿Qué objetivo tiene? ¿Qué aprenden los estudiantes en las excavaciones?
"Además del orgullo de participar en un proyecto arqueológico de primer nivel, cuyo equipo ha sido premio Príncipe de Asturias y por tanto está a la vanguardia de la investigación arqueológica en España, creo que la principal fortaleza de esta beca es su carácter único: hay muy pocos centros en España que tengan la posibilidad de que se les reserve un becario de su procedencia para participar en Atapuerca.
En segundo lugar es un campo de trabajo eminentemente práctico donde los estudiantes van a aprender a escribir, por así decirlo, a partir de la cultura material y de los objetos que se encuentran, todo aquello que estudian en materias relacionadas con la prehistoria y con la prehistoria de la Península Ibérica.
Es decir, los estudiantes van a aprender cómo funciona una excavación; en concreto cómo funciona una excavación con el método arqueológico propio de la prehistoria, que tiene algunas diferencias respecto de la arqueología clásica y que, desde luego en Atapuerca, tiene un carácter muy interdisciplinar donde intervienen geólogos, paleo-botánicos, paleo-zoólogos, etc. Esto último es una fortaleza del carácter formativo y del bagaje de aprendizaje que nuestro estudiante, el que sea seleccionado, se llevará de Atapuerca".
Hablamos de una importante oportunidad para el estudiante.
"Sí. Ya han participado 4 estudiantes a través de esta beca que Atapuerca ha reservado para la UNED de Tudela y es una ocasión única de convivir con un equipo científico de primer nivel, con estudiantes de todo el país y en el proyecto arqueológico de moda,creo, a nivel europeo".
Además del valor científico de sus restos... ¿a qué se debe el prestigio de los yacimientos de la Sierra de Atapuerca?
"Atapuerca es un equipo que está muy bien gestionado y desde el punto de vista científico es muy complementario: está muy abierto a colaboraciones de otras disciplinas y de otros grupos de investigación.
Además, creo que es un equipo que ha sabido comunicar muy bien sus hallazgos, y racionalizar el momento y los tiempos en los que hay que facilitar según qué tipo de información tanto a la comunidad científica como a los medios.
También ha sabido ser un proyecto sostenible que no ha dependido exclusivamente de la financiación pública, sino que desde el primer momento ha recibido financiación privada para dar como resultado una investigación de calidad y puntera a nivel científico".
¿Cuál es su experiencia con otras excavaciones? ¿Cuál es la valoración de los estudiantes?
"En concreto, los estudiantes de la UNED de Tudela que han participado en la excavación de Atapuerca vuelven profundamente impactados por esta realidad de un proyecto muy abierto, muy plural en el tipo de estudiantes que participan y en el equipo que lo gestiona. Creo, además, que vuelven como se vuelve habitualmente de una excavación arqueológica si se sabe llevar bien por parte del equipo que la dirige: más comprometidos con su estudio y con su rendimiento.
Un alumno me contaba que pasaba el día excavando en cuadrículas de 50 cm con estudiantes que están preparando el doctorado, incluso con becarios posdoctorales del propio proyecto de Atapuerca o con los miembros que lo dirigen; eso les posiciona a ellos ante una orientación al logro, de en un futuro poder, quizás, iniciar una investigación en el ámbito de la prehistoria.
Creo que Atapuerca puede ser una buena catapulta para consolidar vocaciones por la investigación arqueológica, en este caso en el ámbito de la prehistoria, y para aprender al lado de los mejores; pienso, además, que esa tiene que ser la voluntad con la que un estudiante participa en una excavación".