¿Cómo ha influido la UNED en mi vida?
Cuando el director de nuestro Centro Asociado me pidió que dijera unas palabras a mis compañeros contando mi experiencia en la UNED, me vinieron a la mente un montón de imágenes desordenadas vividas en estos años. Imágenes, momentos, sensaciones que muchos de nosotros hemos tenido: la euforia de un aprobado, la decepción de un suspenso, la preocupación antes de un examen, la alegría en una reunión con los compañeros en el bar…
Todas las personas que me conocen saben que mi caos es legendario, así que me encontraba totalmente abrumado por sentimientos, sin saber cómo expresarlos… Así que, finalmente, decidí empezar de la manera más lógica y la que me diría mi hija: por el principio.
¿Por qué me decidí a matricular en la UNED?
Siempre he pensado que la vida te va llevando por caminos por los cuales es posible que tú no hayas decidido ir, pero está en nosotros que podamos encontrar una bifurcación que nos reconduzca al camino elegido.
Puede que mi caso no sea diferente al de otros alumnos, ni más importante, ni más novelesco, sólo es el mío. A los 18 años estaba estudiando en la universidad presencial como cualquier chaval de mi edad pero, en un momento dado, tuve que tomar una decisión drástica: la de abandonar mis estudios y ponerme a trabajar.
En realidad, en ningún momento quise dejar de estudiar, pero me vi forzado a ello.
Esa era una espinita clavada que no podía quitarme.
Un día tomando café, José Javier, amigo y también alumno de la UNED, cual “pepito grillo” me alentó para acercarme a la UNED. Para mí, ese momento, el instante en el que me matriculé en la UNED me cambió la vida.
¿Qué me encontré en la UNED?
En la UNED encontré compañeros maravillosos convencidos de querer aprender y que rebosaban energía vital. Como anécdota, debo decir que la primera persona que conocí el primer día de clase -mirando el tablón de los horarios y tratando de identificar el aula a la que tenía que ir- se gradúa hoy también.
Encontré profesores totalmente implicados en el esfuerzo de enseñarnos, y, aunque todos sabemos cómo se estudia en la UNED vi que los profesores saben centrarse en lo importante de la materia, ya que no tienen el mismo tiempo de docencia que en una universidad presencial. Esto, seguro que lo sabe un profesor-compañero llamado Iñaki Alzorriz, a quien conocí en clase de programación 3, como alumno, y que actualmente ha conseguido ser profesor de este Centro. Éste un claro ejemplo de personas excepcionales que hay en la UNED.
También encontré un Centro Asociado que empezaba un nuevo proyecto y que ha ido creciendo hasta lo que es hoy. Me ha dado oportunidad de realizar cursos, conferencias con ponentes de primer nivel, muy importantes para complementar mi formación. También hemos podido hacer excursiones con guías de excepción a Altamira, Atapuerca, Segeda, Los Bañales…
¿Qué he conseguido en la UNED?
Mirándolo fríamente, he conseguido un título académico que me abre expectativas de trabajo a las que antes no podía acceder, y unos conocimientos académicos y técnicos acordes a nivel de estudios.
¿Pero eso es realmente lo que creo más importante?
No.
Volvamos al ejemplo del camino. Imaginémonos que vamos por un camino y éste se bifurca. En principio tú quieres ir a la izquierda, pero en el último momento, un azar del destino te hace ir por la derecha. A día de hoy, he conseguido que, aunque inicialmente me viera obligado a tomar el camino de la derecha, he ido obligando a mi camino a girar a la izquierda, hasta ir en paralelo al camino que me hubiera gustado tomar.
Y esto lo he conseguido principalmente gracias a los conocimientos humanos y personales de esta experiencia.
Muchos pensaréis que, hasta ahora, todo lo que he dicho no son más que palabras bien sonantes, como diría cualquier político en una rueda de prensa…
Para finalizar, os voy a resumir a continuación mi experiencia en la UNED utilizando un símil informático: “cortando y pegando imágenes”:
• Hola me llamo Javier.
• Soy todavía un alumno de la UNED.
• He conocido compañeros maravillosos en UNED.
• Conocí a mi mujer, Arantxa, en los pasillos de la UNED.
• Nos casamos estando en la UNED.
• Tuvimos una maravillosa niña estando en la UNED.
• Ahora vamos a tener a nuestra segunda hija -aún no descarto que pueda nacer en la UNED-.
• Por último, como dice mi mujer, cuando nuestros nietos empiecen en la UNED nosotros seremos UNED, con lo que ello implica. Todos nosotros somos UNED, y pienso que tenemos que empujar a la gente cercana a nosotros a la UNED, ya que podemos hacer que su vida cambie.
Andy Warhol, el gran artista plástico y cineasta estadounidense dijo: “en el futuro todo el mundo será famoso durante quince minutos. Todo el mundo debería tener derecho a quince minutos de gloria”.
Pues bien, a mi ya se me han pasado. Sólo me queda agradecer a mis compañeros de viaje: mis profesores, al personal de administración y servicios, a mis compañeros, a mi familia, y sobre todo a mi mujer que, además de ayudarme a terminar mi carrera, ingeniería informática, ha hecho que aprenda vastos conocimientos de Historia del Arte.
Muchas gracias