“Poder entender sobre el terreno lo que has estudiado en los libros es una gran oportunidad para cualquier estudiante de Historia”

Fernando Casado Villeras es uno de los siete alumnos de la UNED de Tudela que ha recibido una beca para participar en la III Campaña de Excavaciones de la Ciudad Romana de Los Bañales.

¿Por qué has decidido participar en esta III Campaña de excavaciones de Los Bañales?

“Porque el hecho de poder entender sobre el terreno lo que has estudiado en los libros (las técnicas, los edificios, la cerámica, la cultura romana) y poder conocer mejor la historia del territorio del valle del Ebro en el que estamos incluidos es, sin duda, una gran oportunidad para cualquier estudiante de Historia.

Además, ya conocía estas excavaciones de años anteriores. A esto se unen las ganas de continuar descubriendo una ciudad de la que apenas hemos empezado a conocer pero que cada año nos depara alguna sorpresa”.

¿Cómo es vuestro día a día en Los Bañales?

“Nuestra jornada consiste en excavar por la mañana y, ya por la tarde, trabajar en el laboratorio. Está condicionada, en parte, por el clima ya que para evitar las altas temperaturas del mediodía empezamos a trabajar muy pronto: a las 06:30 de la mañana estamos ya empezando a excavar, lo que nos obliga a levantarnos en torno a las 05:45 (nuestro alojamiento se encuentra a unos 13 kilómetros del yacimiento) pero es algo que agradecemos cuando el sol empieza a pegar con fuerza.

Tenemos una parada a media mañana para recuperar fuerzas. Terminamos la jornada de excavación sobre la una del mediodía y nos volvemos a Uncastillo para refrescarnos, comer y descansar un poco.

A las 17:00 horas empezamos los trabajos de laboratorio: lavamos la cerámica, intentamos buscar fragmentos que coincidan y pegarlos, marcamos e identificamos cada pieza... Algunos días el laboratorio se sustituye por charlas impartidas por especialistas en distintos temas relacionados con las excavaciones (cerámica, arquitectura de espacios públicos, del agua,...) De este modo, completamos los conocimientos prácticos que adquirimos durante la mañana.

Sobre las 19:30 horas terminamos las labores de laboratorio y tenemos tiempo libre”.

¿Nos puedes explicar en qué parte de la ciudad romana estáis trabajando y en qué consiste vuestra labor?

“Estamos excavando en varios puntos: un grupo continúa con la zona de viviendas con la que se inició la primera excavación. Nos permite conocer de modo más directo cómo vivían los habitantes de la ciudad, cómo se organizaban; es donde más restos de cerámica, cenizas o útiles domésticos aparecen.

Otros dos grupos trabajan en dos zonas de una estructura que apareció en la campaña anterior: muros de sillares, muy bien trabajados, en la parte baja del foro, que pueden ayudar a salvar el desnivel del terreno sobre el que se encuentra el foro o, por su monumentalidad, formarían parte de algún edificio aún no identificado.

Además, un cuarto grupo excava la parte ya conocida del foro, descubriendo uno de los muros laterales para intentar delimitar el tamaño que tenía la citada plaza pública”.

¿Habéis hecho durante estos días algún descubrimiento o algún avance en la investigación?

“Además de delimitar mejor la estructura de la parte baja del foro (ampliando el número de muros a la vista y su altura) ha aparecido también lo que podría ser un sistema de desagüe bajo uno de los muros. También se han empezado a encontrar pequeños fragmentos de decoración (de algún capitel y probablemente de alguna de las estatuas que adornaban el foro), un par de monedas (que nos pueden ayudar con la cronología del yacimiento), una aguja de hueso para el pelo completa y, en el muro lateral del foro, una estructura que podría corresponder a un acceso a otro espacio o anexo al foro que de momento queda cubierto por la ladera del cerro”.

Desde el punto de vista personal, ¿qué balance haces de estos días de trabajo en equipo?

“El balance, como siempre, muy bueno. Primero, la posibilidad de "descubrir" una ciudad entera abre oportunidades de excavar en diferentes ámbitos (viviendas, edificios públicos, acueducto…) y aumenta las posibilidades de ampliar conocimientos.

Además, está la convivencia con un grupo tan variado de compañeros; en mi tanda estamos 17 alumnos, de casi 10 universidades diferentes (incluyendo de Francia y Suiza) lo que nos permite el mejor conocimiento de la realidad universitaria (Planes antiguos, Bolonia, máster…) pero, sobre todo, y esto es algo que he visto en años anteriores, el ambiente de trabajo y, por qué no, también de diversión, hacen de esta excavación una experiencia inolvidable.

A esto contribuye de modo muy importante el apoyo y el esfuerzo de los organizadores (UNED Tudela, Fundación Uncastillo...) y, sobre todo, la dedicación del equipo técnico que nos facilitan en todo lo posible el día a día de la excavación".